El objetivo de las sesiones de terapia integrativa es devolver el equilibrio a todas las funciones del cuerpo. Para lograr recuperar el equilibrio, utilizo una técnica de testaje muscular: la kinesiología holística. 

La Kinesiología Holística es una disciplina que evalúa la respuesta de las cadenas musculares para detectar desequilibrios en el organismo, y prevenir trastornos, o corregirlos, con el tratamiento más adecuado para cada  persona.

Dentro de mi protocolo de Kinesiología Holística Integrativa hago una valoración global del paciente utilizando el test de AR (arm reflex) y, a partir de esta valoración inicial, busco las técnicas que más se adecuan a cada persona.

Dentro de una sesión de Kinesiología integro varias técnicas como el masaje, la reflexología podal,  las Flores de Bach, el Reiki, ejercicios de respiración consciente, EFT (Técnica de Liberación Emocional), sanación energética/del alma, técnicas Gestálticas, etc. Todo lo que el cuerpo de la persona necesite en esa sesión. Es precisamente el cuerpo del paciente el que va a marcar el ritmo de trabajo, la intensidad y profundidad de la sesión y las técnicas más adecuadas, y es por eso que la evolución suele ser rápida y puede haber cambios visibles en muy pocas sesiones.

A través del testaje kinesiológico, trabajamos a distintos niveles del ser: